Muchos empleadores están optando por los masajes terapéuticos en el lugar de trabajo, con el fin de manejar el estrés en su misma área laboral, ya que es un método rápido, práctico y asequible.
Una buena silla de masajes produce en las personas una sensación de comodidad, relajación y desestrés. Los testimonios de nuestros amigos de Connaxis hablan por sí solos.
1. Requiere poco espacio
Se lo puede ubicar en un cubículo pequeño o una sala de conferencias.
2. En el momento del tratamiento
Los empleados pueden permanecer con la ropa puesta y al no utilizar aceite o crema, no hay preocupación de las manchas en la ropa.
Además
3. Mejora de la salud
Al igual que cualquier otro masaje, reduce la rigidez y la tensión muscular, especialmente en zonas como la espalda, el cuello y el hombro. Una investigación muestra que un masaje por un largo período de tiempo puede mejorar la postura, reducir la presión arterial y también alivia la artritis.
Con un aumento de energía, los empleados están en una mejor posición para concentrarse en el trabajo.
4. Mejora del bienestar
El estrés laboral tiene muchos efectos negativos en la salud del empleado y las empresas tienen que lidiar con altos niveles de absentismo. Además, el estrés hace que la gente se irrite y este de mal humor.
La silla de masaje es muy útil para calmar a la gente, pues cuando se relajan, ellos están más dispuestos a cooperarse unos a otros, incluso no les importa hacer horas extra cuando están felices, porque consideran que la empresa se preocupa por su salud mental y física.
5. Aumento de la productividad
Una breve sesión de masaje puede mejorar la capacidad para resolver problemas, ya que reduce la fatiga y aumenta la concentración.